CONVERSIÓN DE MARÍA MAGDALENA.-PAOLO VERONÉS.-MANIERISMO |
Hay veces en
las que al tratar un tema se entremezclan sentimientos dispares, circunstancias
controvertidas cuando no antagónicas. Y aunque haya momentos en los que haya
que definirse por algo concreto, esa concreción, si se quiere ser riguroso y
objetivo, ha de ser la historia, los hechos concretos admitidos
documentalmente.
En el caso de
esta entrada me ocurre exactamente lo que he dicho anteriormente. Los
Evangelios nombran un personaje que tiene la suficiente entidad, al menos para
mí, como para dedicarle una entrada. Se trata, ni más ni menos, que de María
Magdalena.
Todos conocemos esa
mujer nombrada en los Evangelios al final de los mismos en general, que siempre se han
dicho cosas de lo que había sido y de lo que luego fue, pero ¿realmente es así?
MARIA MAGDALENA PENITENTE.-ANTONIO CANOVA.-NEOCLASICISMO
En principio deseo ceñirme a lo que se dice de ella según Mateo, Marcos, Lucas
o Juan, teniendo en cuenta la historicidad de sus Libros pero dejando claro que no me considero con conocimientos exegéticos
suficientes para tratar el tema en profundidad (ni tampoco sería éste el lugar
apropiado). Tampoco deseo entrar en los planteamientos de si este personaje y la pecadora que lava sus pies y los seca con sus cabellos en casa de Simón el fariseo, son la misma cosa. Aunque sí deseo, como cristiano católico, ferviente seguidor de
aquel joven rabí que tambaleó la sociedad de su tiempo y el mismo Imperio
romano, con una doctrina desconocida para su pueblo y, como todos conocemos, le
costó morir de modo afrentoso en una cruz, dar mi opinión sobre lo que estoy
seguro que NO ES.
Y empiezo por
ahí. La raíz de todo está en la persona de Jesús de Nazaret. Su enfoque de la
vida, su doctrina y la relación con Dios, su interpretación de la Ley, no podía dejar indiferente a nadie.
Los signos que presentaba del Reino de Dios dejaban a unos en el colmo de los
asombros imaginables y les obligaba a replantearse muchas cosas, pero otros
querían buscarle los razonamientos más peregrinos y absurdos sobre los milagros
que presenciaban, con tal de no reconocer lo que realmente era: Dios y hombre
verdadero, el rostro de Dios en medio de sus criaturas:
‘Mientras tanto los maestros de la ley que habían
venido de Jerusalén decían: Está en poder de Belcebú, jefe de los
demonios, por eso puede echar a los demonios.
MAESTROS DE LA LEY Y JESÚS.-JAMES TISSOT.-S. XIX.
Jesús les pidió que se acercaran
y empezó a explicarles por medio de ejemplos:
"¿Cómo puede Satanás
echar a Satanás? Si un reino esta dividido contra sí mismo, no puede subsistir.
Tampoco una familia dividida puede mantenerse. Lo mismo Satanás: si se divide
contra sí mismo como vosotros decís y está dividido, pronto llegará a su fin.
Nadie puede entrar en la casa de un hombre fuerte y quitarle sus cosas si no lo
amarra primero. Sólo así podrá saquearle la casa.
Os aseguro que se perdonará a los
hombres todos sus pecados y cualquier blasfemia que digan, pero el que blasfeme
contra el Espíritu santo no tendrá jamás perdón, será reo de pecado eterno.
Decía esto porque lo acusaban de estar poseído por un espíritu inmundo’. (Mc 3,
22-30)
A poco que hayamos leído o meditado los Evangelios, podremos
ver y entender que la misión de Jesús, además de proclamar la Buena Nueva, el
Reino de su Padre, era ayudar a todos, tener misericordia de todos, empatizaba
con quienes sufrían y los aliviaba o curaba,…De hecho, cuando se le acusaba de
estar con pecadores no se privaba de dar una respuesta contundente: ‘No
necesitan médico los sanos, sino los enfermos. Yo no he venido a llamar a los
justos, sino a los pecadores, para que se conviertan’. (Lc. 5, 31-32).
Para
empezar a entrar en el tema de hoy, aunque lo trate más despacio en otra
entrada posterior, nos detenemos en este episodio evangélico por la
trascendencia que tiene en esta entrada.
EL LEPROSO AGRADECIDO.-WILLIAM HOLE .-S.XIX - XX‘
De camino a Jerusalén, Jesús pasaba entre Samaria y Galilea. Al entrar
en una aldea, salieron a su encuentro diez leprosos, que se pararon a distancia
y, comenzaron a gritar: ¡Jesús, Maestro, ten compasión de nosotros! Al verlos,
les dijo: Id y presentaos a los sacerdotes. Y mientras iban de camino quedaron
limpios. Uno de ellos, viéndose curado, se volvió glorificando a Dios en alta
voz; y postrándose rostro en tierra a los pies de Jesús, le daba gracias. Era
un samaritano. Jesús preguntó: ¿No quedaron limpios los diez? Los otros nueve,
¿dónde están? ¿No ha habido quien volviera a dar gloria a Dios sino este
extranjero? Y le dijo: Levántate y vete; tu fe te ha salvado’.(Lc.17, 11-18).
En este
momento me interesa destacar dos actitudes de Jesús: 1) La compasión por esas
diez personas. Se solidariza con su
sufrimiento. Con la marginación que sufren a causa del mal que padecen. Su misericordia se hace patente a través de la curación de esa
terrible enfermedad. 2) Resalta el
agradecimiento del enfermo que vuelve postrándose a sus pies. Era
samaritano precisamente, no israelita. El Maestro no tenía acepción de personas
como vemos en otros casos (la mujer samaritana, la mujer sirofenicia, etc.) Los
otros nueve, una vez curados no fueron capaces de dar gracias a quien les había
librado de aquella lacra física y social.
Sobre
estas dos actitudes básicamente voy a enfocar el tema, pero veamos primero cómo
era la sociedad de aquel tiempo con respecto a las mujeres y a las
enfermedades, precisamente por el personaje protagonista de esta entrada.
ENDEMONIADO DE GERASA.-JAMES TISSOT.-S. XIX
Obviamente no se conocía la psiquiatría. A quienes padecían
alguna enfermedad propia de esta rama de la Medicina, se decía que ‘tenían un
espíritu inmundo’ para justificarse y porque de alguna manera había que
nombrarlas. A estos se les consideraba ‘impuros’. En Mc. 9, 14-30, nos narra
cómo, a instancias de su padre, curó un muchacho que desde niño tenía, por lo
que conocemos ahora como síntomas de epilepsia, ataques de esta enfermedad.
Cuando ese padre pide por su hijo dice que tiene ‘un espíritu mudo’.
Supongo
que recordarán el pasaje del poseso de Gerasa. Está en Mc. 5, 1-20. Cuando ve a
Jesús se postra a sus pies llamándole ‘Jesús, Hijo del Altísimo’. Y cuando Él
le pregunta cuál es su nombre, le responde: ‘Legión es mi nombre, porque somos
muchos’. Ese sí que podríamos decir que es un caso de posesión diabólica. Y
Jesús curó al muchacho. Marcos dice que ‘los espíritus impuros salieron y
entraron en los puercos de la piara, en número de dos mil, que se precipitó por
un acantilado y cayó al mar y se ahogaron’.
En el
caso de la Magdalena, podemos pensar que eran espíritus referidos a
enfermedades o referidos a posesión diabólica. No lo sé, pero lo que sí sé es
que posteriormente fue un agradecimiento real y leal hacia Quien la salvó de lo
que tenía y desde entonces dedicó su vida a seguirle comprometiéndose igual que
los apóstoles. De ahí el título de la entrada.
Pero no
creo, ni tiene ninguna razón de ser histórica, los bulos que determinados grupos
de personas se empeñan en afirmar que fuera esposa o amante de Jesús.
MARÍA MAGDALENA PENITENTE.-TINTORETTO.-RENACIMIENTO
Decir eso
supone no conocer quién es realmente Jesucristo y además, perder de vista el
motivo real de su nacimiento y vida entre nosotros: redimirnos del pecado. A
costa de su muerte y, como dice San Pablo, ‘y una muerte de cruz’. ‘Tened los
mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús quien, existiendo en la forma de
Dios, no reputó codiciable tesoro mantenerse igual a Dios, antes se anonadó,
tomando la forma de siervo y haciéndose semejante a los hombres; y en la
condición de hombre se humilló, hecho obediente hasta la muerte, y muerte de
cruz, por lo que Dios le exaltó y le otorgó un nombre sobre todo nombre, para
que al nombre de Jesús doble la rodilla cuanto hay en los cielos, en la tierra
y en los abismos, y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor para gloria de
Dios Padre’. (Fil. 2, 5-11). Y Jesús, como Dios que es, estaba por encima de
otras cosas que pudieran distraer un ápice su misión en la tierra.
No creo
tampoco lo que en el Arte (y nuevamente hago constar que me gusta muchísimo)
nos presentan sobre María Magdalena como antigua prostituta y haciendo
penitencia a causa de esos pecados (como verán en los cuadros que pongo al finalizar). Me he desojado consultando los cuatro
Evangelios y en ninguno de ellos hay nada escrito por donde pueda atisbarse el
indicio más pequeño sobre ese particular. Nada que haga referencia a ese tipo de vida. NADA
DE NADA. Es posible que hiciese penitencia, como cualquiera de nosotros,
pero no creo que fuese por ese motivo. Lo realmente interesante e importante
para las personas de todos los tiempos, es el ejemplo que nos ha transmitido esta mujer:
por muy pecador/a que pueda ser cualquier persona, Dios no tiene límite en su
perdón cuando el alma arrepentida, contrita, se acerca a Él reconociendo sus
pecados, y, además, muestra a Dios su agradecimiento con su dedicación al servicio del Maestro y de su Iglesia.
ASUNCIÓN DE MARÍA MAGDALENA.-Tilman Riemenschneider.-GÓTICO |
En la
próxima entrada finalizaremos este tema para no extendernos demasiado. Les
deseo que disfruten con los cuadros.
PIETER BRUEGHEL, EL VIEJO.-RENACIMIENTO |
EN EL DESIERTO.-JOSÉ RIBERA.-BARROCO |
MEDITANDO.-PEDRO DE MENA.-BARROCO |
MARÍA MAGDALENA.-MANUSCRITO ALEMÁN S. XVI-XVII.-HERZOG AUGUST BIBLIOTHEK |
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