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arte

Entró en Jerusalén entre aclamaciones...(y III).-09-agosto-2014

Posted by Caminante y peregrino

ENTRADA DE JESÚS EN JERUSALÉN.-VASILI NESTERENKO.-S. XX-XXI
      A partir de ese momento los días se iban sucediendo y fueron presentándose distintos pasajes que nos refieren los Evangelios, ocurridos entre esa entrada triunfal en Jerusalén, conocido actualmente como Domingo de Ramos o Domingo de Pasión, y el jueves siguiente, que iremos viendo  de forma muy sucinta.
     
Uno de ellos es el que hace referencia a la expulsión de los mercaderes del Templo. San Marcos lo refiere así: 'Cuando llegaron a Jerusalén, Jesús entró en el Templo y comenzó a echar a los que vendían y compraban en él. 
EXPULSIÓN DE LOS VENDEDORES DEL TEMPLO .- FRANCESCO BASSANO .- MANIERISMO.
Derribó las mesas de los cambistas y los puestos de los vendedores de palomas, y prohibió que transportaran cargas en el Templo. Y les enseñaba: -¿Acaso no está escrito: Mi Casa será llamada Casa de oración para todos los pueblos? Pero vosotros la habéis convertido en una cueva de ladrones. Los jefes de los sacerdotes y los maestros de la Ley se enteraron y buscaban el modo de acabar con Jesús, porque lo temían, ya que toda la gente estaba asombrada de su enseñanza'. (Mc. 11, 15-19).
      ¿Cuál fue la causa que le impulsó a tomar esa determinación? Pienso que aquellas personas, con sus tenderetes y mercancías, contribuirían de alguna manera crear confusionismo sobre el auténtico sentido del Templo. Era la casa de Dios y, por tanto, 'su' Casa.
      Aquel no era el lugar más adecuado de adquirir las ofrendas para los holocaustos. Éstas se podrían adquirir en otros lugares y no precisamente allí. La indignación que sentía le llevó a deshacer una cuerda  para formar una especie de látigo y reafirmar materialmente esa expulsión acompañada del volcado de mesas y del esparcimiento de monedas. Pienso que el látigo debió ser , más bien, para espantar a los animales que habían llevado los comerciantes para ser vendidos. Además, con su constante ir y venir, la suciedad y los malos olores que aportaban ( a corral, a excrementos, etc.) no era lo más apropiado para la casa de Dios.
     
      No sabían qué hacer.Querían ver si lo podían coger en contradicción consigo mismo o hacerlo caer en una trampa saducea para ponerlo en evidencia ante sus seguidores. 
ENTRADA DE JESÚS EN JERUSALÉN.-AUTOR DESCONOCIDO.-SIGLO XII.
El motivo no importaba, pero había que hacer algo. Y lo intentaron una vez más: 'Jesús entró en el Templo, y mientras enseñaba, se le acercaron los jefes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo que le dijeron: -¿Con qué autoridad haces esas cosas? ¿Quién te ha dado esa autoridad? Jesús les respondió: -También yo os voy a hacer una pregunta. Si me contestáis, os diré con qué autoridad hago ésto. El bautismo de Juan, ¿de dónde venía, de Dios o de los hombres? Ellos discutían entre sí, y comentaban: -Si decimos que de Dios, nos dirá: '¿Por qué no lo creísteis?' Y si decimos que de los hombres,hay que temer a la gente,porque todos piensan que Juan era un profeta. Así que respondieron a Jesús: -No sabemos. Entonces Jesús les dijo: Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago estas cosas'. (Mt. 21, 23-27).
      No finalizaban las cosas todavía. Le quedaba poco tiempo y lo sabía. Era como una carrera contra reloj. Su lamento sobre Jerusalén no era solamente sobre la ciudad en sí misma. También sobre sus habitantes y los de todo Israel. ¿Qué más hubiera querido sino que su mensaje, iniciado por su primo el Bautista, hubiese abierto los corazones de todos. Realizó gestos, curaciones, expulsó demonios, dio vista a los ciegos y oído a los sordos, pero los ciegos y sordos de conveniencia no se dejaron sanar. Su corazón no iba en la dirección del Mesías, al que no querían reconocer en la persona de Jesús de Nazaret. 
     
      Ni siquiera la resurrección de muertos era capaz de convencerlos. A Lázaro, como hemos visto, lo resucitó cuatro días después de muerto para que todos tuvieran la evidencia de que esas cosas, como un anticipo de la Resurrección Final, solamente era Dios quien podía hacerlo. Y eso era (y es) potestad del Señor de la vida y de la muerte y, por consiguiente, tiene poder sobre ellas. Para algunos de los que lo presenciaron solamente sirvió para que marcharan a ver a los fariseos y a los maestros de la Ley para relatarles el acontecimiento. Pero continuaron con su encono enfurecido hasta el extremo de desear su muerte y ser ellos mismos quienes lo consiguieran. Había que quitarlo de en medio. Como fuese.
      Jesús conocía sobradamente estas cosas así como los sentimientos que albergaban en su contra. Poco antes de llegar el jueves en que se despediría de sus más íntimos celebrando la Pascua, no perdió la ocasión de informas y aconsejar a sus apóstoles y a sus discípulos sobre la forma de ser de los fariseos y de los maestros de la Ley invitándoles a no ser como ellos. A hacer lo que digan pero no a vivir como vivían obligando a hacer cosas al pueblo llano mientras ellos no cumplían lo que predicaban. (Ver Mt. 23, 1-12).
      Pero continuó hablando y no se reservó nada en absoluto. Dirigiéndose en una ocasión a quienes le perseguían, les habló muy claro: 
     
'¡Ay de vosotros, guías ciegos, que decís: -Jurar por el santuario no compromete, pero si uno jura por el oro del santuario queda comprometido! ¡Necios y ciegos! ¿Qué es más, el oro o el santuario que santifica el oro? También decía: -Jurar por el altar no compromete, pero si uno jura por la ofrenda que hay sobre él, queda comprometido. ¡Ciegos! ¿Qué es más, la ofrenda o el altar que la santifica? Pues el que jura por el altar, jura por él y por todo lo que hay encima; el que jura por el santuario jura por él y por quien lo habita; el que jura por el cielo, jura por el trono de Dios y por el que está sentado en él'. (Mt. 23, 13-36).
      Cualquier persona normal hubiera podido entender las comparaciones que estaba haciendo y darse cuenta del mensaje que contenían.Pero ni los fariseos ni los doctores de la Ley querían enterarse. Personalmente creo que sí lo entendieron, al menos unos cuantos, e incluso hubieran podido hacerse un análisis introspectivo de la forma que aquello le afectaba y en qué medida, pero ¿tuvieron alguna reacción?
     
      No obstante, siendo todas ellas portadoras de verdades como el universo, las más directas, pienso yo, son las últimas. Una es ésta: '¡Ay de vosotros, maestros de la Ley y fariseos hipócritas, que os parecéis a sepulcros blanqueados: por fuera parecen bonitos, pero por dentro están llenos de huesos de muerto y de podredumbre! Lo mismo pasa con vosotros: por fuera parecéis justos ante los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y maldad'. Sin embargo, a mi modesto entender, la última, con la que se cierra esta perícopa evangélica, tiene un claro anuncio mesiánico. ¿Fue éste premeditado para advertirles que conocía sus intenciones? No lo sé, pero no me extrañaría lo más mínimo. Fíjense: 'Pues bien, yo os envío profetas, sabios y maestros de la Ley. A unos los mataréis y los crucificaréis; a otros los azotaréis en vuestras sinagogas, y los perseguiréis de ciudad en ciudad. Así os hacéis responsables de toda la sangre inocente vertida sobre la tierra, desde la sangre del justo Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, a quien matasteis entre el santuario y el altar. Os aseguro que todo esto le sucederá a este generación'.
NO SEÁIS COMO LOS ESCRIBAS Y LOS FARISEOS.-JAMES TISSOT.-S.XIX-XX
      Sí, amigos.Habló demasiado claro. El momento de su Misión se acercaba inexorablemente. Más adelante,mientras celebraba su última Pascua con sus amigos, uno de ellos también trabajaba a favor de la ignominia. Pero eso lo veremos más adelante. Ahora les dejo con algunas manifestaciones artísticas del Domingo de Ramos:   
 JEAN HIPPOLYTE FLANDRIN.-ACADEMICISMO

MONASTERIO DE PANTANASSA EN MISTRÁ, GRECIA.-1428

CAPITEL ROMÁNICO.-MONASTERIO DE SAN JUAN DE LA PEÑA

NICOLÁS DE VERDUN.-ROMÁNICO